-¿Quien sos?-
-Soy ama de casa, Reikista
y kinesióloga-
-No. Eso es lo que hacés. No quien sos-
-Repito la pregunta entonces. ¿Quién sos?-
-mmmm… No tengo idea!-
Entonces empezó a preguntarse
quién era en realidad. Para qué estaba aquí. Cuál era su contribución al
planeta, su don único para compartir… Y si realmente quería seguir
identificándose con sus roles externos o ir más profundo y encontrarse de
verdad.
La realidad es que en lo externo
todo estaba mal. Su matrimonio iba en picada, su hija decidió irse a vivir sola
después de una fuerte discusión que tuvieron, y en lo laboral acababa de cerrar
un hermoso consultorio que había puesto haciendo un gran esfuerzo, porque los costos de alquiler eran altísimos
y no podía seguir afrontándolos.
Ella sentía que hasta este
momento había dedicado su vida a “resolverle” los problemas a los otros. A
ayudarlos a encontrar respuestas y caminos… Pero no podía encontrar el suyo. Se
sentía perdida con demasiado conocimiento y respuestas automáticas que
aparecían por defecto desde su cabeza –su ordenador decía en chiste-, pero
allí, en su corazón: Ese era un verdadero misterio.
Ella recomendaba a todas sus
clientas y amigas a escucharlo y seguir solamente su sabio consejo. Pero ella
misma no podía conseguirlo.
Había días en los que se sentía
verdaderamente vacía. Sola. Perdida. Su mundo entero estaba afuera, y se estaba
desmoronando. Debía haber algo más, algo que verdaderamente pudiese hacer por
Ella sin necesitar que todo aquello se acomode en el exterior. Eso ya lo había
intentado. Y sabía que era imposible.
¿Entonces? ¿Estaba todo perdido?
-¿Cuál es tu mayor deseo?-le
preguntó una amiga
-Ser feliz aún sin motivo. Sólo
Por que sí-se escuchó contestando.
Esas palabras siguieron resonando
adentro suyo. ¿Será posible? se preguntaba una y otra vez. Y si lo fuese, ¿qué
podría hacer para alcanzarlo?
Se le ocurrió hacer una lista de
cosas que la llevaran a cumplir su deseo:
-Tratar de estar presente en cada
momento para hacer sólo aquellas cosas que me acercaran a mi deseo-
-Hacer elecciones que me hagan
sentir bien en cada momento.
-No mentir ni siquiera en
pequeñas cosas. En nada.
-No hacer aquellas cosas que hago solamente para que me aprueben y me
quieran.
-Ser fiel y honesta a mí misma. A
mi querer y sentir de cada momento
-Mostrarme tal cual soy aunque me
exponga a que me juzguen
-No juzgar a nadie ni hablar mal
de otros. Tratar de que de mi boca sólo salgan palabras bonitas.
-Escuchar más, hablar menos.
-Tomar responsabilidad de todo lo
que me pasa. Yo soy la que elijo bien o mal en cada momento. No hay culpables.
Solo soy yo eligiendo bien o mal.
-Hacer las paces con todos los
que me encuentro separada o peleada
-Perdonarme por los errores que
cometí, enmendarlos si es posible y dejarlos atrás para siempre. No castigarme
más por ellos.
-Amarme y aceptarme como soy. Con
mis defectos y mis virtudes. Abrazarme. Felicitarme por mis logros.
-Enfocarme en la parte positiva
de las cosas en vez de ver todo lo malo. Esto último solamente me llena de bronca y tristeza y me produce una
resistencia que me estanca.
-Dar amor. Sonreir. Ayudar al que lo necesite. Compartir.
Escuchar. Llevar alegría a donde vaya. Ser generosa. Estar más atenta en dar
que a recibir. Hacer todas las cosas-especialmente las que no me gustan como
limpiar la casa- desde ese espacio de dar, de contribuir en vez de enfocarme en
la bronca de no tener el dinero para pagarle a alguien que lo haga por mí.
-Buscar un momento al día para
frenar mi mente. Meditar. Aquietar mis pensamientos.
-Confiar en que hay un Dios que
quiere lo mejor para mí. Y que todo lo que va apareciendo es para que pueda
crecer y estar mejor. No resistirme a nada.
-Hacer ejercicio físico todos los
días para mover la energía y mantener mi cuerpo en buen estado. Alimentarlo
sanamente y a conciencia. Cuidarlo. Amarlo.
Hace un mes que está poniendo en práctica esta lista y ya
se siente mucho mejor. Por momentos no se le hace fácil. Pero Ella mantiene su
deseo. Si se equivoca vuelve a empezar. Cada momento le da una nueva
oportunidad. Dos pasos para adelante y uno para atrás. Sus logros la alientan. Sus
momentos de paz en aumento le dicen que va por buen camino. Su foco está puesto
en su deseo. No lo suelta. Es su único objetivo. Todo lo que hace en cada
momento presente, es para cumplirlo!
Les mando un abrazo gigante. Que tengan unos días maravillosos!
Majo
"¿Cuál es tu mayor deseo?-le preguntó una amiga
ResponderEliminar-Ser feliz aún sin motivo. Sólo Por que sí- se escuchó contestando.
Esas palabras siguieron resonando adentro suyo. ¿Será posible?"
Es en verdad enorme, profundo y muy alentador.
Resuena en mi también, en cada fibra, tan primigenio anhelo.
Regresar a ese lugar desde el que "Ser" es la Dádiva, el Presente y la Sinfonía.
En palabras muy sencillas expresas (creo yo) la mayor y más extraordinaria de las aventuras. Descubrir la "fuente" de la que somos expresiones. La Dicha.
Ah, tu relato me llena de confianza... y de poder.
Gracias Majo.
Gracias Luis por tus bellas palabras de siempre qvan directo a mi corazon.Gracias bello keridisimo!! Abrazote gigante!
EliminarMaravillosa guía . Gracias por tu amor incondicional , suele ser el mas puro . Bendiciones infinitas y abrazos al alma.
ResponderEliminarGracias a vos querida Maria Elena por tus bellos comentarios! Abrazotes
Eliminarya tienes una seguidora más! me encantó tu blog
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