EL CAMBIO. REY MUNDO EGOGRANDE III... Lo maaaassss!!! :)

            El hecho es que Reymundo podrá tener muchas características fáciles de “juzgonear” J, pero lo que no se puede discutir, es que tropezón tras tropezón siempre se levanta a buscar nuevos horizontes y respuestas… Al menos no se queda lloriqueando por allí sólo victimizándose… Y dicen que el que busca, en algún momento encuentra.. J

           

            Pepe Barriopobre era un “amigacho” de la infancia… Quizás el “veintiúnico” que conservaba desde entonces… Y esto de “conservar” también era una suerte de “ficción” por el momento, ya que con toda esta “variación de status” de Reymundo,  Pepito pasaba a ser una suerte de “vergüenza pública” que lo conectaba con aquél pasado que tanto quería dejar atrás (en el que era de “clase social baja”, pobre y “sin posibilidades”).

            Ya “nada de eso” había en el “nuevo, lustroso, afamado,  acomodado y acaudalado” Reymundo Egogrande J (al menos eso es lo que él quería creer- glup! J).

            La cuestión es que en estos momentos desesperados en los que “priman las huevaas del corazón”, Reymundo se acordó de su compañero:

            - ¡¡Queridooo!!, ¡¡tanto tiempo!! ¿Qué ha sido de tu vida?... Nada mal por lo que veo, eeeeh?-

            Entre otras cosas, Pepito le recomendó ver la película “El Secreto” y una psicóloga “transpersonal” que lo había ayudado en momentos de crisis.

-         ufff, con tanta pavada- Suspiró Reymundo… Pero esta vez ya no se le ocurrían otras alternativas para “distraerse”, por lo que consiguió la película y un turno con esa “psicóloga no se cuánto” L

            Vió como cinco veces la película… Eso de que uno atraía todo lo bueno y lo malo que a uno le pasaba en la vida… Eso de poder elegir… Eso de la energía….

-guau!- no lo entendía demasiado pero le daba una perspectiva nueva y diferente a su vida.    Definitivamente algo “había movido esto en su interior” que lo lanzaba hacia la búsqueda de nuevos horizontes J

            Llegó el día de su primer encuentro con la psicóloga  “rara” J… -Ya no tenía nada que perder…ma siiiii- Tocó la campanita de la puerta sin estar completamente seguro de quedarse o salir corriendo.

            Esta mujer estuvo una hora y media hablándole de cosas que jamás había oído…       Algunas le provocaban hasta un poco de “miedo”.

            Salió con todo “revuelto”, confundido. Con una mezcla de profunda tristeza, bronca y miedo… Pero algo nuevo palpitaba en su corazón… Algo diferente que le indicaba que “debía seguir yendo”:

-         Me parece que estoy volviéndome loco- (y esta vez lo sentía de verdad  y esto le provocaba muuucho miedo… Miedo a lo desconocido… Miedo al cambio… Pánico en realidad L )

            Fueron épocas difíciles… Todo en lo que había creído comenzaba a desmoronarse. Nada era ni se sentía como antes.

            Empezaba a no estar a gusto con su “grupo de amigos nuevos”, ni haciendo los programas que últimamente disfrutaba, ni comprando compulsivamente… Cada vez se sentía más vacío y solo… Y loco L… Pero esa pequeña lucecita que lo llenaba de una “paz desconocida” en algunos instantes fugaces lo alentaban a seguir adelante.

            El miedo a volverse loco y a morir iban en aumento. Los ataques de pánico estaban “a la orden del día”. Cuando ocurrían se tiraba al piso y anotaba todo lo que estaba sintiendo sin parar, escribía y escribía sin pensar, tal como le había dicho la terapeuta… Esto lo ayudaba bastante, aunque no era suficiente. No quería empastillarse, pero tampoco quería sentirse así… Y tampoco quería “tener paciencia” como le decía su psicóloga, aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhh!! J

       Este capítulo ha sido cortito... He estado engripada y poco productiva, lo siento :) , aún así he querido compartirles un "bocadillo" más de esta historia que ni yo sé hacia dónde me llevará :). Los abrazo hasta la próxima semana. Que tengan días maravillosos!! Majo